martes, 5 de febrero de 2013

Cobayo


El Conejillo de indias o cobayo, es una especia de mamífero roedor de la familia Caviidae,  originaria de la región andina de América del Sur. Alcanza un peso de hasta 1 kg. Vive en áreas abiertas y utiliza hoyos y madrigueras para ocultarse y protegerse. Vive entre 4 y 6 años. La especie fue descrita por primera vez por el naturalista suizo Conrad von Gesner en 1554. Su nombre científico se debe a la descripción de Erxlebenen 1777, y es una mezcla de la designación del género de Pallas (1766) y el nombre específico dado por Linneo (1758).

Alimentación: Su dieta debe basarse en verduras verdes crudas, siendo estas suministradas en varias y abundantes raciones diarias. Los cobayos pueden ingerir hasta un 40% de su peso corporal en verduras.

También podemos alimentar a nuestro cobayo con raciones especiales para cobayos, pero como complemento y no como única dieta.


El agua será suministrada a través de un bebedero para roedores de gota.


Hábitat: Se los puede alojar tanto en una pecera de vidrio como en una jaula. En el segundo caso, los barrotes deben ser de acero inoxidable y sin pintar ya que la roeran y la pintura pueden ser tóxica. Como sustrato utilizaremos viruta (sin procesar), colocando una gruesa capa de la misma. Esta debe ser removida totalmente con frecuencia ya que su acumulación puede generar una gran humedad, perfecto para el desarrollo de bacterias.

En cuanto a la ubicación de la jaula, no debe estar expuesta a corrientes frías de aire, ni al sol directo.


Por lo general son muy sociables, por lo que no debería haber ningún problema en tener grupos con machos, hembras y crías en un mismo lugar.


Manejo: Los cobayos no suelen ser para nada agresivos, y es muy raro que muerdan. Al momento de manejarlos se deberán evitar los movimientos bruscos ya que están siempre atentos, y podría provocar su huída. Una ves acostumbrados al contacto humano son sumamente dóciles.

A lo largo del tiempo el ser humano ha criado cuyos para consumir su carne y hacer ropa con su piel, además de animal de compañía; es un animal muy común para la experimentación en investigación biomédica, de allí la expresión popular como sinónimo de experimentación. 

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